Los algoritmos juegan un papel crucial en nuestra vida cotidiana, están presentes a pesar de si quiera darnos cuenta de ello, un algoritmo no es más que una secuencia ordenada y finita de pasos o instrucciones las cuales nos permitirán llegar a un resultado u objetivo en específico. En nuestro día con día utilizamos algoritmos en todo momento, para mover nuestro brazo, caminar, hacer una receta de cocina o procedimientos algebraicos son solo algunos del sin número de aplicaciones que tienen los algoritmos, que dicho de otro modo, los algoritmos no son más que una eficaz herramienta que utilizamos a diario para encontrar la solución de problemas a los que nos enfrentamos.
Los algoritmos se han convertido en una de las herramientas lógicas más importantes de la tecnología del siglo XXI, pues en la mayoría de los casos el funcionamiento de dichos dispositivos (herramientas) basan su funcionamiento en complejos algoritmos que facilitan la realización de ciertas de tareas, ahora, con el crecimiento exponencial de la era de la información, los algoritmos juegan cada vez más un papel importante, puesto que se apropian cada vez más de los procesos tecnológicos que se involucran en nuestra vida cotidiana, en especial al manejo de grandes cantidades de información, la cual permite optimizar las tareas realizadas por cierto programa o buscador, teniendo como resultado el poder resolver problemas en específico.
Como dije con anterioridad, hoy en día los algoritmos son los encargados de manejar grandes cantidades de información, en donde todo aquello que se muestra en nuestras Redes Sociales (Facebook, Twitter, Instagram) o algún otro medio electrónico dependen en su mayoría del uso de complejos algoritmos que nos permiten visualizar en nuestro dispositivo lo que a nosotros nos interesa con base en la información que le hemos proporcionado anteriormente.
Desde mi punto de vista considero que los algoritmos han jugado un papel muy importante desde el inicio de la humanidad puesto que gracias a ellos hemos podido encontrar la manera más eficaz de resolver los problemas a los que nos enfrentamos día con día, sin embargo estos evolucionan de acuerdo a los requerimientos que se tengan, por ello, en algunas ocasiones, resulta inútil utilizar un algoritmo "viejo" para solucionar problemas actuales.
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